¿Porque las latinas somos más gorditas?
Hay varias razones, una de ellas es que hay un grado menor de educación y
conocimiento sobre lo que es una buena alimentación. También hay más
tolerancia, es más algunas latinas creen que es mejor estar gordito que
tener el peso normal.
La Biblia no habla mucho sobre el peso,
en parte porque no existían muchos problemas de gordura en ese tiempo.
En las iglesias difícilmente se habla en contra de la gordura. Lo que la
Biblia deja claro es que nada debe de dominarnos y eso incluye la
comida. Nuestro Señor es Cristo.
En algunos casos las personas comen por
satisfacer necesidades emocionales, en otras por aburrimiento. En otros
se comen comidas malas para la salud por ignorancia o por pereza.
Adelgazar no es fácil pero comer
saludablemente y en moderación si lo es. He conocido personas que a
quienes el medico les ha dicho tienes que comer saludablemente o te
puede dar un paro cardiaco y lo hacen y otras que solo quieren que las
medicinas les controlen todo.
La diabetes tipo 2 es totalmente
reversible si se come lo correcto y casi siempre totalmente evitable si
se hace lo mismo. Nadie esta a salvo de la obesidad, si ahora somos
delgadas eso no quiere decir que lo seremos siempre. Tenemos que
cuidarnos y cuidar a nuestros niños y no criticar a nadie.
En Cristo podemos ser fuertes, podemos
buscar ayuda para aprender, podemos buscar actividades que no involucren
comida, podemos celebrar sin comer y podemos pedir sabiduría para comer
saludablemente.
Si tienes problemas de peso no solo hagas dieta pídele ayuda a Cristo. Ten fe y descansa en el señor, Dios te ayudara.
Las iglesias creo que pueden ayudar a
educar sobre lo que es una buena alimentación y tener más actividades
físicas como practicar deportes juntos, ir a caminatas etc. En lugar de
hacer celebraciones comiendo se pueden hacer celebraciones de otra
forma. También se pueden dar guías sobre las comidas que se pueden
llevar a actividades en la iglesia y evitar las peores.
Que Dios nos ampare en este problema porque trae enfermedades y acorta la vida.
“En Cristo somos más que vencedores”

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